Con el mayor respeto y aprovechando la plataforma que Cubadebate brinda, en muy pocos casos disiento y en lo fundamental coincido con la opinión fundamentada de Joel García en su artículo “El después de Barranquilla en la pelota cubana”., y me atrevo a hacerle llegar estas modestas consideraciones, razones y sin razones que matizan el candente tema que es nuestro deporte nacional.
Por Lic. Elio Raúl García Reyes
2018 07 30 15H55
(Mis comentarios los seguiré exponiendo destacados en color rojo. ERGR.) “El después de Barranquilla en la pelota cubana”.
“La pérdida del cetro regional es la última señal de una copa
que viene rebosándose desde hace mucho rato. Sería muy iluso (injusto) responsabilizar solo a
Carlos Martí con este nuevo revés, aunque su dirección pueda haber cometido
imprecisiones en Barranquilla; como tampoco debiéramos buscar en los números
finales (294 bateo colectivo, 2,08 en promedio de carreras limpias y 993 en
fildeo) el argumento perfecto para exponer que la preparación de casi tres
meses fue la ideal, pues la mejor fórmula para validar un sistema de
entrenamiento, desde épocas remotas, han sido los resultados. Y para el nivel
de este torneo regional, el único resultado posible (esperado) era revalidar la corona.”
Continúa el artículo de Joel: “¿Acaso un segundo lugar ante
peloteros boricuas agrupados a la carrera y que juegan en una liga doble A en
su país; o de veteranos venezolanos que ya vivieron sus mejores años en la Liga
Profesional y casi se unieron en el aeropuerto; o de colombianos que apenas
cuentan con una liga seria de béisbol hace menos de 20 años, por solo citar
tres ejemplos, puede considerarse aceptable para una selección nacional como la
nuestra?” (En la
confianza está el peligro y SÍ puede pasar y ha pasado más de una vez. Y no le
ha pasado solamente al béisbol, le puede pasar a cualquier otro deporte, incluso
fuera de los deportes, por aquello de “no hay enemigo pequeño” (ni tampoco muy
joven o muy viejo) aunque sabemos que lo que “lastime a la pelota” hace que chillemos
como perritos pateados. Peloteros agrupados a la carrera o veteranos reunidos
en el aeropuerto, son peloteros, y olvidar que la pelota es redonda pero viene
en caja cuadrada, es algo que puede pasarle a los que “se saben” superiores en
el juego, confían, se descuidan y ahí llega la “sorpresa”.
“Volvamos a las esencias
y no a lo que pueda entorpecer los análisis futuros. Es cierto que hay un éxodo de
peloteros hacia las Grandes Ligas y a otras de mayor remuneración
económica que la nuestra sin la participación o contrapartida de la Federación
Cubana de Béisbol por las leyes del bloqueo de Estados Unidos.” (Razón 1. A esas “Grandes
Ligas” y las “Otras” generalmente van “los mejores”, lo que es un ingrediente a
tener en cuenta ahora y en el futuro pues continuará de esa forma.)
“Es innegable también
que la
emigración de una fuerza técnica calificada hacia el exterior … (Razón 2. No importa si es
para emigrar, mejorar la vida o abandonar el país, su ausencia tiene también mucho
peso en el asunto, y lo cierto es que INFLUYE y no poco, diría que MUCHO en
cantidad y calidad) …ha desprovisto a este
deporte (y a otros tantos) de muchos entrenadores en la base y por tanto
disminuye la búsqueda de talentos… (Razón 3 ¿Por qué disminuye?
¿Falta de recursos? Influye…mucho, pero no determina. ¿Falta de gestión de los
que DEBÍAN HABER REACCIONADO y salir a meter el hombro, más allá de Directores
Técnicos, Entrenadores y Funcionarios? Determina y mucho. ¿Puede hacerse algo
al respecto? TIENE que hacerse o ...) …se frena el desarrollo
en todas las categorías.
“Es realidad como un templo que faltan implementos para la
práctica masiva y que los que existen o se pueden adquirir en las
tiendas (pero) no van a parar a manos, en
muchos casos, de los que más virtudes tienen para jugar, sino de
los que más poder adquisitivo reúnen hoy en nuestra sociedad.” (Razón 4, tenemos un
cascabel pero muchos gatos responsables, un problema de dos décadas no es atribuible
solamente a peloteros, directivos y funcionarios de la pelota y del INDER ya
que toca un tema que afecta a toda la sociedad, no solo al deporte.)
“Es igualmente imposible pensar en echar hacia delante un carro
como este si dejamos a la espontaneidad los planes de entrenamiento de cada
provincia para las Series Nacionales, tal y como ha ocurrido en las
últimas campañas.” (Esta ya ES la Razón de las Sin Razones, la Sin Razón de las Razones,
el disparate potenciado. La espontaneidad está bien y se aplaude en encuentro
de decimistas ingeniosos haciendo malabares con las rimas, pero fatal para lo
CONCRETO. Es indiscutible que la espontaneidad en estas circunstancias no solo
no es deseable sino es catastrófica y con Joel enfatizo pues la espontaneidad
es una especie de gemela de la improvisación.)
“Y así pudiéramos seguir mencionado variables, una más, otras
menos, que andan poniendo minas a las bolas y los strikes desde hace más de dos
décadas. Por eso, más allá de lo que se ha logrado a través de contratos
internacionales en Japón, Italia o Canadá; o de cambios de estructuras para
mejorar un poco más la calidad en una segunda fase, el béisbol cubano necesita, lo
implora, una revisión a fondo, casi un Congreso, con todos los actores sociales
que intervienen, tocan o rozan su vitalidad y salud, liderados por el INDER. “
Conclusiones: A nadie le gusta perder, pero pierden y al poco tiempo se les pasa.
Los Cubanos no somos ese “NADIE”, no nos gusta perder, Y NO SE NOS PASA NUNCA. ¿PERDER?... ¡ni a las escupidas!
Veamos
que nos depara el "Después de Barranquilla en la pelota cubana."
Conclusiones: A nadie le gusta perder, pero pierden y al poco tiempo se les pasa.
Los Cubanos no somos ese “NADIE”, no nos gusta perder, Y NO SE NOS PASA NUNCA. ¿PERDER?... ¡ni a las escupidas!