jueves, 12 de mayo de 2016

En inglés, para que el “jefe” no tenga dudas y nos aplauda por democráticos.



Impeachment. En inglés, para que el “jefe” no tenga dudas y nos aplauda por democráticos. 


Temer, el jefe de la pandilla golpista.


No conozco a Bruno Bimbi, no sé dónde vive, de qué partido es, ni siquiera sé si estas cosas que escribe son ciertas. Solo pienso, ¿y si fueran ciertas? Los días que vienen le darán la razón a Bruno o lo despedazarán. Pero en todo caso, si solo una parte de lo dicho fuera cierto, si solo uno o dos de los “ministros” hubiera hecho lo que se dice en los tuits de Bruno, y si yo no estuviera claro de dónde viene la “aprobación y aplauso del golpe”, si no tuviera en cuenta que impusieron hasta la palabrita “impeachment” como si no hubiera palabras suficientes en español, o mejor dicho sintiendo la necesidad de asociar su canallada al líder de los canallas hablando en su idioma, aun así, claro que no solo odiarían a Dilma, sino también y sobre todo al cambio en Brasil hacia la construcción de un mundo multipolar, palabra que aterra a la potencia que para reafirmar no hay dudas es la mayor y poderosa del mundo nos habla de la cantidad de soldados y bombas que tiene por todo el mundo.

El nuevo ministro de Desarrollo Social de Temer es el principal defensor de la internación compulsiva de usuarios de marihuana.
El nuevo canciller de Temer perdió dos elecciones presidenciales: una con Lula y otra con Dilma, a la que acusaba de "abortista asesina".
El nuevo ministro de Educación de Temer es del partido que impugnó ante la Corte las políticas afirmativas para negros en las universidades de Río de Janeiro.

El nuevo ministro de Transportes de Temer fue condenado por la justicia por desviar fondos de los comedores escolares de su estado.

El nuevo ministro de Ciencia de Temer finalmente no fue el pastor creacionista, sino uno de los peores intendentes que tuvo San Pablo.

El nuevo ministro de Salud de Temer está siendo investigado por la justicia por fraude en licitaciones.

miércoles, 11 de mayo de 2016

A propósito de la Declaración de la ANAP frente a medidas de EEUU

Un comentario sobre la Declaración del Buró Nacional de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) frente a medida del gobierno de EE.UU.
EXPORTAMOS CAFÉ. NO SE VENDE DIGNIDAD.
El pasado 22 de abril, el Departamento de Estado anunció la decisión de incluir el café en la lista de productos cubanos producidos por el sector no estatal, que se permitiría sean importados en ese país. Con esta acción se daba continuidad a una medida adoptada por el gobierno de los Estados Unidos en febrero de 2015, autorizando exportaciones cubanas muy limitadas, que excluyeron todos los bienes y servicios producidos por empresas estatales.
Si usted es un lector promedio, con una información promedio acerca de cómo funciona el acontecer del mundo contemporáneo, puede pensar con toda razón que el Dpto de Estado, la Casa Blanca, el @POTUS, y todo el aparato estatal de los EEUU están “con reales intenciones de normalizar las relaciones con Cuba”, sobre todo si se concentra en mirar en las declaraciones solo las “relaciones” Cuba EEUU y no se toma el trabajo de ver por donde andan las relaciones de EEUU con el resto del mundo. Una palabra saltaría a la vista: hegemonía.
Pero leer un párrafo no es suficiente para enterarse de “todo lo demás”.  Veamos que nos trae ese “todo lo demás”.
Para empezar tomemos nota de lo que el Dpto de Estado de EEUU aclaró para hacer la declaración más puntual:
-       “los empresarios cubanos tienen que demostrar su independencia del Estado”.
Esta expresión puede para algunos restringirse a un criterio de calidad del producto. Si usted es de lo que piensa eso empezaría por sugerirle un test de inteligencia, o mejor aún, un test de patriotismo, con algunas preguntitas sobre Historia de Cuba, incluidos por supuesto los últimos cien añitos.
El propósito, dice el comunicado del Dpto de Estado, es:
-        “apoyar la capacidad del pueblo cubano para lograr un mayor control de sus propias vidas y determinar el futuro de su país”.
¡Fabuloso! ¡Qué solidaridad! ¡Cuánta nobleza! ¡Qué Gesto!
Lo que no se dice, se esconde, se escamotea al lector, es que, en virtud del bloqueo estadounidense, que se mantiene INTACTO, cualquier producto cubano que se quiera exportar a los Estados Unidos, además de los permisos correspondientes, tiene que pagar las más altas tarifas de aduana, lo cual hace prácticamente imposible su exportación a ese país por un productor aislado.
Nadie, en su sano juicio, puede pensar que un pequeño productor agrícola puede exportar directamente a los Estados Unidos, pues no solo son operaciones que generalmente se llevan a cabo a través de empresas de comercio exterior y lo más importante, significan operaciones y transacciones financieras en dólares, actualmente monitoreadas, espiadas y frecuentemente expropiados esos recursos en el marco del bloqueo.
Sin ser muy ducho en temas políticos, sin ser “fan a muerte” de la Revolución Cubana, usted lector amigo muy pronto se dará cuenta de estas realidades que se esconden en las declaraciones citadas:
-       Desconocer y como menos ignorar el papel del estado cubano en precisamente crear las condiciones y acompañar durante más de 50 años los procesos para que existan productores no solo de café, desde que en la temprana fecha de 1959 se firmó por el Comandante en Jefe Fidel Castro la Ley de Reforma Agraria, que dentro de 7 días cumplirá 57 años de firmada (17/05/1959).
-       Pretender distanciar de su Estado al campesinado cubano, que para nuestra honra proveyó a la Patria de líderes y héroes desde la lucha contra la colonización española primero, y contra la dominación abierta o solapada de los Estados Unidos sobre Cuba después. Por solo mencionar dos nombres, Antonio Maceo y Jesús Menéndez, sin olvidar el papel del campesino cubano en las filas del Ejército Rebelde, aquel que con menos de 3 mil hombres derrotó a los 30 mil del ejército de la dictadura, armado, entrenado, y avituallado por los EEUU, con lo que defendía  su posesión de casi las tres cuartas partes de las tierras cultivables de Cuba mientras nuestro campesinos eran desalojados y hasta asesinados. 
-       El anuncio es, en resumen, la manifestación clara, abierta y sin paños tibios de cuál es el real significado de su “cambio de táctica”, y cuáles son sus medios sutiles (si es necesario, violentos) que emplea para “conseguir el mismo objetivo”, que no tiene nada que ver con la “libertad, y los derechos humanos” y el resto de otras lindas palabras, sino dividir al pueblo, desintegrar la obra, desmantelar la Revolución Cubana, destruir todo lo que el pueblo cubano precisamente ha alcanzado en materia de libertad y derechos humanos.
Si en realidad el Gobierno de los Estados Unidos quisiera hacer algo por el pueblo cubano debería: levantar definitivamente el bloqueo económico, comercial y financiero, impuesto a Cuba desde hace más de 50 años, que es el principal obstáculo para el desarrollo del país.

Por lo demás, hasta ahora, y así seguirá siendo, Cuba, el Estado Cubano, la Sociedad Cubana, sus hombres, mujeres y niños, sus obreros, sus campesinos, sus profesionales, los jóvenes y los viejos, sus dirigentes, mucho más bien que mal han permitido, que la Patria resista y se mantenga, como alguna vez se dijo, como Faro de Luz para toda nuestra América.

Si no está de acuerdo con lo expresado, argumente. No ofenda, insulte, denigre, pues pierde su tiempo y además reafirma su propia condición:
"Los hombres que no tienen fe en su Patria, son hombres de siete meses." José Martí.