Por
Elio R. García Reyes
2017 09
22.
En un texto feisbukiano leía hace
un rato lo siguiente: “…es
necesario e importante que el ex presidente Correa defienda su gestión, ante
tanto ataque mal intencionado e infame, pues la idea es hacer creer que nada ha
valido” y me pareció tan honesta la
expresión que me obligó a pensar si realmente, después de haber tenido que
pensar, diseñar, acometer, profundizar y dedicar una importante parte de su
vida, también tuviera que defender y defenderse (hubiera podido seguir impartiendo
clases que seguro generarían menos sobresaltos al individuo y sobre todo a su
familia, me imagino los hijos de Correa asistiendo al bombardeo de insultos al
que veían sometido a su padre día por día, diez años).
Por eso me atrevo a expresar unas
breves y conocidas ideas (no estoy
inventando el agua tibia) sobre lo que el ex Presidente Correa podría
realmente hacer ante la evidente falta de compromiso, lealtad y seguimiento de
la idea y el propósito de hacer una Revolución Ciudadana. De hecho los juicios
que a veces he escuchado sobre lo que se hizo y lo que se pudo hacer y lo que
no se hizo, me han hecho pensar que los pueblos somos muy exigentes cuando vemos
y entendemos que “ese alguien tiene un algo” nos va a considerar, nos tomará en
cuenta, pensará en y con nosotros y por eso seguimos, no al hombre
independientemente de sus valores personales, sino a la vocación por servir a
una causa por la que hemos esperado ya más de un siglo.
Una Revolución, tenga el apellido
que tenga, en el nuestro Ciudadana, no es un esfuerzo fugaz, de diez años,
presupone la dedicación profunda a entender y buscar solución a problemas que aquejan
al mundo desde hace mucho, y los poderosos no están interesados en resolver, ni
afrontar, y ni siquiera a tomarlo en cuenta. Los pueblos somos, para ellos, lo
que eran para los señores feudales los caballos, las vacas, los esclavos:
simplemente facilitadores de su holgada vida, para eso nacimos, creían ellos.
No se cambian los imaginarios de
los pueblos en diez años. Sería lo ideal, pero no es posible, hay que cambiar
demasiadas cosas torcidas o crear tantas que ni siquiera se habían pensado, que
diez años es demasiado poco. Pensemos que en diez años apenas un niño que
cumplía 5 ó 6 años de edad podría alcanzar estar en los primeros años del
Bachillerato, no más. Y pensemos que será, una buena parte de ese tiempo, con
los profesores “que había”. Se necesitan cientos, miles de profesores para lo
cual se necesita tiempo, no se fabrica un maestro, un profesor, amasando un
poco de arcilla con agua y un rato en el horno.
En general, países como el
Ecuador, disponiendo apenas de materias primas (algunas de ellas, como el petróleo de una calidad no estándar, con un
precio castigado por esa calidad) con lo cual afrontar un presupuesto que
proveyera al ciudadano de una buena y sólida educación como maestro, requiere no
menos de entre 18 y 20 años. Y más aún, como le decía a mis estudiantes desde
el primer día de clases: “Ustedes van a estar 3 años en el Instituto “enterándose”
de qué se trata lo que van a ejercer después. Pero empezarán a “estudiar” desde
el primer día de trabajo y estarán “estudiando” hasta el fin de sus días
laborales.”
Sé que muchos lo entendieron,
pero lamentablemente sé que algunos no, y más lamentable aún, no lo entendieron
las autoridades de la institución. Por eso para muchos países, que como Ecuador
solo disponían de ciertos recursos naturales y poca o ninguna infraestructura
para servirse de ellos en pos del desarrollo, esos tiempos no eran ni siquiera
tenidos en cuenta, pues no entraban en el esquema de los poderosos del momento.
Unos 47 años atrás fue que
Ecuador pudo hacer exportaciones importantes de petróleo, que ya se conocía
desde 1925 su existencia pero sin posibilidades de extraer y exportar como para
sufragar el desarrollo. Y para colmo, la mayor parte de los valores de esa
exportación quedaba en manos de las compañías petroleras, posiblemente la
mayoría norteamericanas o con capital importante de ese país. Solo hasta 2007
fue que el petróleo ecuatoriano fue de los y para los ecuatorianos.
Por eso pienso y suscribo la idea
de que el ex Presidente Correa no debe ni tiene que defender su gestión, pues
no ha sido nada hecho tras bambalinas, todos ignorantes de lo que ha hecho, ha
sido todo de frente, como es su estilo, y bendito estilo, y a la vista de
todos... los que no sean de esos ciegos que no quieren ver o algunos que
prefieren mirar para otro lado. Defender
el proceso iniciado, mantener intacta las razones por las cuales se comenzó ese
proceso que no es otro que alcanzar la segunda, “única, verdadera e irrenunciable independencia”. (1) Eso si puede, debe y con seguridad
hará el compañero Rafael Correa.
Ahora bien, estimada Elizabeth, que
los ataques, como usted bien califica, infames y añado yo desleales, y sin
fundamento se viertan por boca del actual y futuro ex Presidente también, NUNCA
podrán hacer creer a nadie honesto, simplemente honesto, que NADA HA VALIDO.
Tal situación la descarta la
presencia material de cientos de obras, como peyorativamente las llama el
actual huésped de Carondelet, CEMENTO, (parece que él piensa construir
escuelas, hospitales, aeropuertos, puentes, carreteras, hidroeléctricas y
refinerías de bambú), pero también lo descarta la realidad que a ningún hombre
o mujer le falta la diálisis que necesita o muere.
Que nunca antes de estos 10 años
ganados se vio que al inicio de un curso escolar los padres NO tuvieran que
aportar 25 o más dólares para que su hijo estudiara en una ESCUELA PÚBLICA con
pupitres destartalados, que los libros, si no los compraban los padres, los
niños no los verían ni un solo día del curso. ¿Cómo olvidar la proeza de sentar
a los potentados a renegociar los contratos petroleros para que el petróleo
ECUATORIANO, de los ECUATORIANOS volviera a las manos de su verdadero y único
dueño?
No puede nadie, ni el futuro ex
Presidente, ignorar (por muy ignorante
que alguien sea) que la Base de Manta de los asuntos que menos se
interesaba eran los del narcotráfico, y tenían más puestos su interés en la
conculcar nuestra soberanía (2).
Como también los "actuales
dialogantes" (antes furibundos
fustigadores no solo de la persona del Presidente Correa sino de toda la obra
de la RC y muy en particular a los Enlaces Ciudadanos) chillan como hienas
contra la Ley de Comunicación es bueno recordar, y todos recordamos, que la
prensa mediocre y reaccionaria, se pasaba 6 días escribiendo, diciendo y
"mostrando" falsos videos mal intencionados (3) y en una
mañana de sábado las patrañas e inventos eran desenmascarados.
Y resalto estos detalles pues la
noticia es lo que decían "no tenemos libertad de expresión".
Nunca se vio tanta libertad de expresión sino en estos 10 años y hasta se abusó
de ella emitiendo falsedades que jamás pudieron probar. Pero ahora el banquero,
que parece ser también comunicador "sin libertad de expresión", aboga
por la supresión de la Ley de Comunicación y otras lindezas como eliminar el
impuesto a la salida de divisas.
En fin, estimada Elizabeth, tendría
que ocurrir un fenómeno que no ocurre sino cada 500 años, supongo: un ignorante
y desleal de poca monta, logra engañar a 16 millones de personas haciéndoles
creer que las obras y la dignidad humana recuperada en apenas 10 años es un
espejismo, o peor aún, están podridas por la corrupción.
No lo logrará y caso que sucediera,
solo a los que no nos plegamos al engaño nos tocaría, si es necesario, comenzar
de nuevo. Eso implica ser revolucionario, es un camino que tiene fin solo
cuando nuestro cuerpo ya no de más, y solo quede la obra en la conciencia de
todos los compatriotas que nos rodean, aunque no estemos.
(1) Fragmento del
discurso pronunciado por el Comandante Ernesto Che Guevara como representante
de la República de Cuba a la Asamblea General de las Naciones Unidas el 11 de
septiembre de 1964.
(2) Como se evidenció, aunque entre los
gringos y el Uribe echaron tierra al asunto y tampoco Ecuador contaba en ese
entonces con la técnica para determinar cómo fue posible que la Fuerza Aérea
Colombiana fuera tan "CERTERA" al encontrar en plena noche en la
Selva Amazónica un pequeño campamento de las FARC, y no hubiera podido
"acabar" con la guerrilla con la misma eficiencia en tantos años).
(3) Recordemos el video en que se veía “al Ejército
Ecuatoriano, persiguiendo con fusiles a pacíficos ciudadanos", que resultó
un video de no se sabe cuándo pero si se sabe dónde y quién lo suministró, todo
para confundir a la población.